lunes, enero 22, 2007

besos de horas extras (retomando)

Eran las diez de la mañana y aun no la habia visto en su oficina ni en ningun lugar del periodico, era como si la tierra se la hubiese tragado, no respondia el celular y en su casa la contestadora era el unico rastro de su voz que habia escuchado desde que nos despedimos las madrugada anterior...

2 comentarios:

DrLacxos dijo...

y tan chin?????

nah sigo leyendo!!!!

Anónimo dijo...

es cierto Kami, tan chin ??